LA NUEVA CARA DE KATIE: EL PRIMER TRANSPLANTE FACIAL





Les invito a acompañarnos en un extraordinario viaje de una joven que se sometió a un trasplante facial. Nuestro rostro representa quiénes somos, mostrando miles de emociones. ¿Somos nuestro rostro? Katie Stubblefield perdió el suyo a los 18. A los 21, los médicos les dieron uno nuevo.




En su mayoría de edad,, Katie intentó quitarse la vida a causa de sus problemas familiares, económicos , etc. Aunque sobrevivió, su cara se quedó desfigurada. Después de meses de espera, Katie se sometió a una compleja operación cambiando completamente su aspecto anterior. Le dieron una nueva identidad a esta joven luchadora y valiente.

La familia de la chica acabó amándola y apreciando su nuevo yo. Para entender y conocer mejor su increíble historia, los Stubblefield nos dieron a conocer su rostro después y antes del trasplante. Pero vivir con una cara a la que Katie llama Shrek era muy duro y estresante para ella. Recibía insultos y desprecios tanto en el colegio como en la calle, incluso de ella misma.

Le ayudaban en sus necesidades básicas y en su comodidad. Debido a sus dificultades, Katie necesitaba diversos aparatos para hacerle la vida mejor.

El optometrista de Cleveland Clinic Robert Engel le volvió a colocar las lentes de sus ojos. Estas lentes le protegían las córneas debido al roce de sus pestañas.

Katie conoció a otras personas que recibieron un trasplante facial del hospital y la joven se apoyó en sus argumentos para seguir adelante y no darse por vencida.


Después de varios meses de espera, Andrea Schneider, muerta por sobredosis de cocaína le “presta” su cara. Conectaron vasos sanguíneos y nervios para colocar la piel y unir el sistema nervioso con el cuerpo, así la sangre de Katie podría recorrer otra vez su cara. Para esta operación, los cirujanos usaron instrumentos de hojas finas.

Mediante la rehabilitación, Katie se fue recuperando de los cortes. De vez en cuando, Katie mostraba diversos síntomas debido a sus largas horas en un quirófano usando bolsas de plástico para los ojos, etc.


Katie se recuperó del todo y donde antes no encajaba ahora era querida por todos sus compañeros y seres queridos.

Estos son pequeños detalles que ocurren a lo largo de nuestro desarrollo en la tierra. En este caso la vida le dió una segunda oportunidad a Katie después de que ella se dara por vencida. Esta chica consiguió mucho con un acto de cobardía, ahora está avanzando en su vida enfrentándose a cada obstáculo que se le ponga en su largo camino de felicidad y esperanza. Todos merecemos segundas oportunidades.


Autora: Ainhoa López


https://www.nationalgeographic.com.es/mundo-ng/nueva-cara-katie-trasplante-facial-historico_13042/5

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